En una operación realizada por las autoridades griegas, se han clausurado un total de 26 bares debido a sospechas de malas prácticas. Estos establecimientos eran investigados por evadir impuestos y llevar a cabo actividades ilegales relacionadas con la venta de alcohol. Sin embargo, lo que se descubrió durante la redada resultó aún más sorprendente: los bares estaban reutilizando las sobras de bebidas dejadas por los clientes.

Según informa el New York Post, la Autoridad Independiente de Ingresos Públicos (AADE) decidió llevar a cabo una minuciosa inspección en respuesta a las sospechas de evasión fiscal y la posible venta de alcohol adulterado o proveniente del contrabando. El descubrimiento realizado dejó a todos perplejos.

Durante el allanamiento, se encontró que estos bares no habían emitido al menos 40,000 boletas fiscales con un valor total aproximado de 280,000 dólares. Esta falta reveló una grave infracción tributaria. Pero lo más impactante fue el hallazgo de bebidas sin número de lote registrado, lo cual planteaba serias dudas sobre su legalidad y procedencia. Como resultado, se tomaron ocho muestras para realizar un análisis exhaustivo.

Aún más perturbador fue conocer la peculiar práctica que seguían estos establecimientos: los meseros recolectaban las bebidas no consumidas por los clientes para posteriormente servirlas como «shots» a nuevos comensales.

Como consecuencia de estas irregularidades, los bares fueron clausurados durante 48 horas y sancionados económicamente. Además, se espera que enfrenten repercusiones legales adicionales a medida que las investigaciones continúen.