La pareja real conformada por el príncipe Harry y Meghan Markle asistió el pasado martes 16 de mayo a la gala Women of Vision Awards en Nueva York, donde la ex actriz fue reconocida como «un modelo a seguir» a nivel mundial. Sin embargo, al retirarse del evento se desató un escándalo debido a que uno de los representantes de los duques de Sussex afirmó que fueron víctimas de una persecución «casi catastrófica» por parte de paparazzi.

La situación llevó a la pareja real a refugiarse en una comisaría de policía en Manhattan y luego tomar un taxi. El taxista identificado como Sukhcharn Singh, aunque apodado Sonny, transportó al hijo de Lady Di, su esposa y la madre de ella por diez minutos.

Sobre la persecución, Singh dijo no creer que fuera algo exagerado y negó que los reporteros fueran agresivos: «Estaban detrás de nosotros. Quiero decir, los teníamos encima, eso fue todo», afirmó.

Singh relató que se encontraba conduciendo por la calle 67 cuando recibió una llamada del guardaespaldas del príncipe para recogerlos: “Tenía al príncipe Enrique y su esposa subiendo al taxi”, contó.

Durante el corto trayecto hasta el hogar donde se estaban alojando sus pasajeros -una pareja amable según describió- les bloquearon el paso un camión recolector; momento en el cual llegaron los paparazzi para tomar fotografías. La situación terminaría llevando nuevamente a los duques regresar hacia la comisaría en búsqueda protección policial.

Al finalizar el recorrido, Harry y Meghan se despidieron amablemente de Singh con una propina generosa de 50 dólares. «Fue genial. Diez minutos en coche, 50 dólares. ¿Qué más se puede pedir?», finalizó Sonny con una sonrisa frente a los reporteros.