Se llevó a cabo el «funeral de alto riesgo» de Moisés Gallardo, también conocido como «El Mota», quien falleció a los 33 años en circunstancias sospechosas al caer desde su departamento en Roma, Italia. La ceremonia se llevó a cabo en la comuna de Pedro Aguirre Cerda y estuvo marcada por el lanzamiento de fuegos artificiales. Gallardo era conocido por más de veinte delitos, incluyendo receptación, robo con violencia y sorpresa. Vivía desde hace siete años fuera del país y la Interpol ya había hecho consultas sobre él desde Suecia y Argentina.
Las autoridades clasificaron el funeral como «alto riesgo», lo que llevó incluso a la suspensión de clases en algunos sectores. La pareja de Gallardo, quien viajó desde Italia para despedirse del delincuente, expresó su indignación: «Me da asco todo eso porque él no era así. No era narcotraficante (…) nunca traficaba», afirmó.
La familia quería una despedida tranquila para Gallardo pero reconoció que no iba a ser posible debido al impacto causado por las quince bombas lanzadas durante la ceremonia fúnebre en su honor.
